domingo, 14 de mayo de 2006

UN PRIMERO DE MAYO DE LINAJE REPUBLICANO
Fue un privilegio. Y a la vez, un paso más en el largo camino de rescate de la memoria, de los valores y del sentido colectivo de aquello que ha estructurado mi vida. Banderas republicanas, mujeres y hombres muy mayores, familias hasta en cuatro generaciones, sentimientos de dolor, emoción y reposo. Reconocimiento por parte del Gobierno Municipal de Marchena, Sevilla, Andalucía, a través de las palabras de su Alcalde, Luis Jiménez Gavira. Décadas de dolor, silencio, humillaciones sumadas en un instante de comunión ciudadana. Cuando la democracia construida en los últimos veinticinco años en Andalucía, incorpora a sus hitos monumentales el recorrido de la memoria y lo plasma en una plaza de juegos infantil, tal vez está incorporando simbólicamente el sentido de muchas vidas segadas, de muchas otras que se fueron con el dolor de no saber donde están sus muertos, de muchas que aún viven intentando exorcizar la esquizofrenia social de setenta años, para poder vivir públicamente su cultura, sus valores, siento que, una vez más, la vida me ha regalado el momento de sentimiento colectivo que mis padres no pudieron vivir. ¿PARA QU É? ....”para que nunca más haya detonaciones al amanecer, como en el 36, que terminen con la vida de ciudadanos y ciudadanas de Marchena”. Para que la historia no se repita, para que los nieto/as que alguna vez espero vendrán, y los que vengan tras de ello/as, puedan recorrer calles de los mundos que les antecedieron, sintiéndose parte de un caudal de esperanzas, heroísmos y sabiduría que impregna las calles de pueblos y ciudades que se hacen cargo del linaje republicano que ha inspirado a tantos y tantas a lo largo ya de siglos. No sé si es verdad que la justicia tarda, pero llega, pero estoy convencida de que en esa búsqueda de justicia porfiada e interminable, el proceso es lo que queda, porque la recuperación y valoración de la memoria histórica, es una escuela de democracia y justicia que nos va formando a todos y todas. Tal vez incluso a muchos que vivieron, involuntariamente, en una cultura del olvido que enferma a la sociedad. Reconocimiento institucional, reconocimiento social para el reconocimiento vital que cada uno/a de nosotros necesita hacer propio. ¿POR QU I É N E S? Francisco y Luz Solidaria, Laureano y Florentina, Salvador, Elena, Julio Tomás, Santos y muchos otros que viven en mi memoria. Ayer estuvieron en Marchena, jóvenes y hermosos, asistiendo a otra fiesta de la memoria, de su memoria, de la nuestra y de la de los que están por venir.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Precioso comentario de Angelina que vivió este momento junto con todos nosotros. Bienvenoda a este proyecto.